Confusión
Despertó convencido de que era jueves. Se vistió con su uniforme de trabajo, preparó el café y salió al portal. El silencio era absoluto, las calles vacías. Pensó en una huelga. Consultó su reloj: 6:00. Todo normal. Caminó hasta la parada y esperó. Nadie llegó. Al sacar el móvil, leyó: domingo. Lo guardó sin sorpresa. Se sentó en el bordillo y sonrió, sin recordar si debía ir a trabajar o a descansar, ni por qué esa diferencia le importaba.